Niemeyer, Fichte y Fröbel

Niemeyer, principios de la educación y la enseñanza àdomina la pedagogía alemana durante la primera parte del Siglo XIX, se la juega por una educación diferenciada: educación para las clases.

Dirige y orienta la política pública de los maestros alemanes,  propuso una educación clásica y diferenciada con un debate que ye no es tan natural, propone en la educación un espíritu libre, recto y satisfecho, con gusto hacia lo que hace en relación del trabajo y postula que la burguesía es la que más se presta para la educación.

Fichte, Discurso a la nación alemana à defiende los discursos de educación alemana

Continua la corriente idealista iniciada por Kant, su carácter y sus ideas lo ubican dentro de las personalidades pedagógicas más sobresalientes de la época. Para Fichte la salvación de la nacionalidad está en la educación y por ende es necesario que la educación llegue  a todos  los ciudadanos sin excepción alguna.

La educación ha de ser eminentemente activa, basada en la propia actividad del alumno donde lo importante no es el conocimiento sino la voluntad, esto convierte a Fichte en uno de los primeros representantes del activismo y el voluntarismo en la pedagogía. Fichte es el máximo representante de la Educación de Estado y de la Escuela Nacional. Del mismo modo ha sido uno de los primeros defensores de la escuela unificada al pedir la educación de todos en todos los grados de la educación según su capacidad e independientemente de la posición social o económica.

Froebel, La educación del hombre à inventor del kínder garden en Alemania, si programa se trata de formar seres humanos.

En 1816 se dedica a la educación de los niños fundando una escuela llamada “Instituto General Alemán de Educación”; debido a sus ideas liberales se refugia en Suiza, lugar donde concibe si idea de la educación a la primera infancia.

En Froebel influyeron de manera significante las ideas de Shelling y de Krause, las ideas pedagógicas de Froebel aparecen en su obra fundamental La educación del hombre, expuestas en una forma simbólica y abstracta.

La educación ha de adaptarse a las etapas del desarrollo del hombre reconociendo así el valor de cada una en especial las de la infancia. Se anticipa a su tiempo en otras ideas hoy comunes como la idea de actividad y la idea de libertad, éstas constituyen la esencia de su doctrina; otra de la ideas de Froebel y que caracteriza su método de educación, es el valor que asigna al juego para la educación.

“El juego es el más puro y espiritual producto de esa fase del crecimiento. Es a un mismo tiempo modelo y reproducción de la vida total, de la íntima y misteriosa vida de la naturaleza en el hombre y en todas las cosas. Del juego manan las fuentes de todo lo bueno…el niño que juega tranquilamente con espontánea actividad, resistente capaz de sacrificarse por su propio bien”